El trimestre pasado iniciamos las Tertulias Literarias en 2º y 4º de ESO con buenos resultados. Remplazamos el examen del libro por la lectura en clase y en casa, para posteriormente hacer una tertulia pautada, semejante a las Tertulias Literarias Dialógicas. Este trimestre hemos continuado, con la certeza de que esta práctica afianza la lectura, crea vínculos, propicia el pensamiento crítico y compartido. Es una forma de acompañar el proceso lector sin que apenas se note, el profesor pasa a ser uno más y la tertulia la conducen los alumnos. Al menos eso sería lo deseable, ya que a los profes de lengua nos cuesta un poco callar. Aquí compartimos la tertulia que grabamos sobre La casa de Bernarda Alba, tras leerla en clase. Ha sido una experiencia magnífica, creo que todos hemos disfrutado de Lorca. Recomiendo esta práctica sustitutiva del típico examen, en el que ni se acompaña el proceso lector, ni se promueve el gusto por la lectura. Tan solo se obliga a leer un libro y al cabo de un tiempo a contestar unas preguntas sobre el mismo. Si lo que pretendemos es que la mayoría de los alumnos lean y disfruten, ese no es el camino. Los libros deben estar presentes en el aula, se debe hablar y debatir sobre ellos, intentar incluirlos en nuestro proceso de aprendizaje, y de algún modo en la vida de nuestros alumnos. Yo adoro la literatura de Lorca y he intentado por todos los modos contagiar mi entusiamo a los alumnos. Creo que ese es el camino.