Tanto Sara como yo creemos que merece la pena detenernos para intentar que la lectura no seconvierta en una tortura y de este modo se nos ocurrió una actividad de anticipación a la lectura, para intentar implicar a la mayor parte del alumnado, incluídos los más reticentes.
No se trata en este caso de una actividad TIC, sino, más bien de un ejercicio típico de obsevación, conocimientos previos, imaginación y diálogo.
Utilizamos una sesión para presentar en clase y con detenimiento, el libro que deben leer en la 2ª evaluación, La puerta trasera del Paraíso de Luis Leante que Sara había elegido. En esta sesión, nos dedicamos a observar el libro, la ilustración de la portada, el título, la editorial, el autor y lo más importante, la reseña de la contraportada.
A partir de esta reseña empezamos a elucubrar acerca del contenido del libro. De todo ello, surgió un diálogo muy interesante con los alumnos que aproveché para plantear una serie de cuestiones, intentando abrir su apetito lector. Creo que hemos conseguido, como mínimo, picar su curiosidad.
Durante las vacaciones deben contestar las cuestiones que surgieron antes de leer el libro. Después deben comenzar a leer unos cuantos capítulos y entonces comprobar si aquello que intuyeron era cierto. La verdad es que estoy impaciente por conocer los resultados.